Todos deberíamos leer este libro con 18 años y entenderlo** |
Continueamente me acuerdo del que yo considero el mejor libro jamás escrito sobre bolsa e inversión. No es casualidad que viniera recomendado/impuesto por uno de mis dos jefes favoritos del mundo, que es además una de mis personas favoritas del mundo junto con mi otro jefe favorito (ahora pienso la suerte que he tenido en la vida, no con los maridos pero sí con los jefes) que también es una de mis personas favoritas del mundo. También he tenido varios jefes cabrones que me las han hecho pasar canutas... Pero no sé si es mejor tener un buen curro con un jefe cabrón o un curro cabrón con un buen jefe. ¿Qué os parece?
Cuenta Peter Lynch que fue a precisamente al final de los años 20, el momento en el que el mercado bursátil empezó a ser percibido por la gran masa como una inversión conservadora y segura, una "inversión prudente" le llama él, que hasta el momento había sido considerado terreno de temerarios, cuando ese mismo mercado, fuertemente sobrevalorado, se convirtio en una ruleta más que en una inversión. En palabras literales de Lynch, "generalmente la bolsa se percibe como una inversión segura en el preciso momento que no lo es".
Otro de los grandes, Warren Buffet, ha dicho: "En lo que a mí conciene, los mercados (bursátiles) no existen. Están ahí solo para servir de referencia para ver si hay alguien dispuesto a hacer alguna estupidez." Refiriendose a que lo que de verdad existe es el negocio y el trabajo diario y el comercio y los beneficios reales de la gente real que, en efecto luego traspasarán a un plano financiero y se multiplicarán o no en cifras macro, pero que siempre parten de un intercambio real de trabajo, bienes, servicios y dinero.
Hay un pasaje de este libro que me llamó la atención la primera vez que lo leí, y como puede ver el lector del blog, sigo recurriendo, cada oportunidad que me brinda la situación económica.
Traduzco sin demasiado cuidado: Estoy acostumbrado a oír que la crisis del 87-88 es un doble casi exacto de la crisis del 29-32 y que estamos al borde de entrar en una nueva gran depresión.Y de hecho la crisis del 87 es en muchos sentidos similar a la del 29. Y qué? Si volvemos a entrar en una gran depresión, no será porque se hunda la bolsa, más de lo que lo fue la primera (el hundimiento de la bolsa es un reflejo, no una causa). En aquellos días sólo el 1% de la población tenía carteras de acciones. La primera gran depresión sucedió por una ralentización de la economía en un país en el que el 66% de la población activa trabajaba en el sector manufacturero, el 22% en la agricultura y en el que no existía la seguridad social, desempleo, planes de pensiones, seguros, fondos de garantías ni nada parecido. Hoy en día sólo el 25% de la población activa se ocupa en la fabricación de bienes, la agricultura supone menos del 3% y el sector servicios, que ha estado creciendo sistemáticamente durante las épocas expansivas y recesivas supone más del 70%*. Al contrario que en los años 30, hoy en día la mayor parte de la población tiene una casa en propiedad y en muchos casos esas casas valen hoy mucho más que cuando se compraron - cierto que unas cuantas no, cierto, pero son la minoría más minoritaria; la mayoría de las familias cuentan con dos sueldos. Así que si estamos al borde de una gran depresión, no será en absoluto como la de los años 30.
Este párrafo fue y sigue siendo una epifanía para mí. La Gran Depresión americana de los años 30 tuvo a la gente sin comida que llevarse a la boca, sin techo bajo el que dorminr, sin trabajo, sin nada. Y esa misma sociedad salió de aquella profunda pobreza, igual que se ha recuperado Alemania de las dos guerras, Polonia e incluso Rusia de la catástrofe comunista. Japón de todas sus maldiciones, y el Sudeste asiático de las suyas. De hecho los únicos países que han permanecido sumidos en la pobreza crónica y pertinaz son los que se han mantenido fieles a la tiranía del comunismo.
Pero se salió del 29, se salió de la del petróleo, se salió de la liberalización de tipos de interés, se salió del fin del monopolio (virtual) de Telefónica, se salió de Internet, se salió de la reconversión, se salió del primer imperio del PSOE, hemos salido de dos guerras mundiales, del telón de acero, de los 80s, de la pubertad, hace falta que siga?
Una de las muchísimas cosas divertidas de este libro es esta lista de estupideces que dice la gente sobre la bolsa; sólo una muestra:
1. Si ha bajado tanto, ya no puede bajar más
2. Ha subido muchísimo, ya no puede subir más
3. Sólo 0.5€ por acción, cuánto puedo perder?
4. Ya subirá
5. Cuando vuelva al precio de compra, vendo
Y mis favoritos:
Si una acción que he comprado sube, debe ser que tengo razón
Si una acción que he comprado baja, debe ser que me he equivocado
Dice Peter Lynch que el único motivo por el cual si hoy compro una acción y el precio de ésta mañana ha subido es porque ha habido alguien dispuesto a comprar por más precio que yo. Y biceversa. El que tenga entendederas que entienda.
Y aún es posible que de esta nos vayamos efectivamente al carajo, que se acabo el mercado libre, los coches de gasolina y el regaliz. Torres más altas han caído, decía siempre mi madre. Y quizá no le falte razón.
* Son datos de EEUU en los años 90
** ¿Porqué en el colegio te obligan a leer filosofía y poesia y no esto? No lo entenderé JAMÁS!!
Sobre el jefe y el curro... No tengo datos, yo siempre he tenido un trabajo duro y un jefe cabrón. Ahora tengo un cabrón canario y una maricona gorda e ignorante (que además me quitó el puesto a mí) Así que no puedo contrastar, yo no sé lo que es tener un jefe agradable.
ResponderEliminarEl tema de la bolsa para mí es ininteligible. Lo considero enormemente interesante pero desconocido, como Japón.
Estoy de acuerdo en que es absurdo que nos enseñen tantas cosas inútiles y nos falte algo tan importante como la vida real. Porque la vida real es esto, y no las matrices o el latín.Así nos va