sábado, 19 de febrero de 2011

Posiblemente, la mejor canción del mundo

Some people call me the space cowboy, yeah
Some call me the gangster of love
Some people call me Maurice
Cause I speak of the pompitous of love

People talk about me, baby
Say I'm doin' you wrong, doin' you wrong
Well, don't you worry baby
Don't worry
Cause I'm right here, right here, right here, right here at home

Cause I'm a picker
I'm a grinner
I'm a lover
And I'm a sinner
I play my music in the sun

I'm a joker
I'm a smoker
I'm a midnight toker
I sure don't want to hurt no one

I'm a picker
I'm a grinner
I'm a lover
And I'm a sinner
I play my music in the sun

I'm a joker
I'm a smoker
I'm a midnight toker
I get my lovin' on the run
Wooo Wooooo

You're the cutest thing
That I ever did see
I really love your peaches
Want to shake your tree

Lovey-dovey, lovey-dovey, lovey-dovey all the time
Ooo-eee baby, I'll sure show you a good time

Cause I'm a picker
I'm a grinner
I'm a lover
And I'm a sinner
play my music in the sun

I'm a joker
I'm a smoker
I'm a midnight toker
I get my lovin' on the run

I'm a picker
I'm a grinner
I'm a lover
And I'm a sinner
I play my music in the sun

I'm a joker
I'm a smoker
I'm a midnight toker
I sure don't want to hurt no one
Wooo Woooo

People keep talking about me baby
They say I'm doin' you wrong
Well don't you worry, don't worry, no don't worry mama
Cause I'm right here at home

sábado, 12 de febrero de 2011

El santo del amor

y de los bombones y la ropa interior roja y de los polvos... A quién se le ocurrió tamaña y rentable gilipollez...
Aprovechando que el Pisuerga pasa por Valladolid y que en estos días se habla del amor y la lujuria (más bien del consumismo mal entendido, porque yo nada tengo contra el amor, y aún menos contra la lujuria) y que todas las revistas publican recetas para SanValentín, y regalos para SanValentín, y planes para SanValentín, a quien yo llamo SanCalentón, voy a hablar yo de dos lecturas amorosas. Las dos me apasionan porque considero a los autores dos de las personas más listas que han pisado la tierra.
Una, Guillermo Shakespeare, un genio que escribió el Rey Lear. Se me llenan los ojos de lágrimas sólo con pensar en el discurso de Cordelia diciéndole a su padre cómo le quiere, después de haber oído a sus dos hermanas chupópteras y abrazafarolas babear en la oreja de su padre. ¡Es un reflejo tan real y tan eterno de la naturaleza humana! ¡Y que por mucho que hayamos leído a Shakespeare sigamos igual! - Espera, cuántos hemos leído a Shakespeare? Ah! vale, ahora lo entiendo. No he dicho nada.
Recordemos las palabras de Cordelia y de su padre:
http://www.librosgratisweb.com/pdf/shakespeare/el-rey-lear.pdf (versión en español)

KING LEAR
To thee and thine hereditary ever
Remain this ample third of our fair kingdom;
No less in space, validity, and pleasure,
Than that conferr'd on Goneril. Now, our joy,
Although the last, not least; to whose young love
The vines of France and milk of Burgundy
Strive to be interess'd; what can you say to draw
A third more opulent than your sisters? Speak.
CORDELIA
Nothing, my lord.
KING LEAR
Nothing!
CORDELIA
Nothing.
KING LEAR
Nothing will come of nothing: speak again.
CORDELIA
Unhappy that I am, I cannot heave
My heart into my mouth: I love your majesty
According to my bond; nor more nor less.
KING LEAR
How, how, Cordelia! mend your speech a little,
Lest it may mar your fortunes.
CORDELIA
Good my lord,
You have begot me, bred me, loved me: I
Return those duties back as are right fit,
Obey you, love you, and most honour you.
Why have my sisters husbands, if they say
They love you all? Haply, when I shall wed,
That lord whose hand must take my plight shall carry
Half my love with him, half my care and duty:
Sure, I shall never marry like my sisters,
To love my father all.
KING LEAR
But goes thy heart with this?
CORDELIA
Ay, good my lord.

¿Se percibe la intención? Espero que sí. Cordelia, lógicamente acaba siendo la única que, tras la traición de las otras dos pelotas, chupópteras y mentirosas, acoge al rey y le cuida y respeta con la coherencia que demuestra a lo largo de toda la obra. Lamentablemente el mundo sigue siendo de los fariseos, de los egoistas, de los mentirosos, pelotilleros, manipuladores y vendealmas. En los tiempos de Shakespeare y en todos los tiempos.
Aprovecho para recomendar igualmente la versión japonesa que hizo Akira Kursawa en Ran.

Y hablando de Shakespeare, Martha Beck, otro genio que da buen nombre a la especie y que suele citar al autor inglés con la misma frecuencia que a Tolstoy y a Lao Tse, tiene una preciosa idea sobre el amor, que roba también de la leyenda del Rey Oku, en la que se basa Lear. La gurú Beck hace una lista razonada y muy interesante de cómo saber si de verdad se quiere, como Cordelia, sin adornos, sin lenguaje de consultoría, sin adjetivos ni cursiladas, sin neurosis, sin adicciones, he aquí la base de su artículo:
How to know it is real love:
1. Soy perfectamente capaz de vivir sin tí
2. No voy a quererte siempre igual
3. Tú no eres lo único que hay o necesito en la vida
4. No voy a estar pegado a tí siempre
5. Tu y yo no somos uno, somo dos

Mi regalito de San Calentón - un trocito de Lear por Lawrence Olivier y John Hurt haciendo de bufón

viernes, 4 de febrero de 2011

Sabiduría femenina, 3 en 1

Yo a los 40 empiezo a saber que no sé nada. Más vale tarde que nunca. Y aún así me da la sensación de que hay gente que sabe menos, mucho menos. Me doy cuenta de que la ignorancia es un rincón húmedo y calentito donde se puede vivir muy feliz y muy pagado de uno mismo. Allá ellos.
La doctora Christiane Northrup fue (hace ya algunos años) un descubrimiento, una revelación y la respuesta llana, honesta y directa a muchas preguntas que, o no me atrevía a hacer, o era mejor que no hiciera o para las que no había respuesta en mi universo misógino, integrista y carcamal.
Las mujeres, igual que el resto de la creación, somos seres hormonales y hormonados, causa y efecto de enrevesados procesos químicos mucho más complejos que una falda y un par de tacones, pero mucho más simples y terrenales que una virgen vestal, etérea nodriza de la humanidad.
Las mujeres nacemos, crecemos, nos reproducimos y morimos, igual que los hombres; pero además, y a diferencia de ellos, ovulamos, menstruamos, gestamos, parimos, amamantamos y por fin nos apagamos y lentamente desaparecemos (como los soldados) hasta convertirnos en el polvo del que salimos. Por todo ello estamos toda nuestra vida mucho más a merced de las hormonas que cualquier otro ser viviente - asumiendo que todos lo estamos.
El papel que nos ha dado la naturaleza, desgraciadamente entra en conflicto muchas veces con el que nos da la sociedad, la tradición y hasta nuestras madres. Conjugar todos esos papeles con un mínimo sentido común, productividad, autoestima, destino y felicidad no parece ser una tarea fácil. Conozco demasiadas mujeres, incluyéndome yo en esa lista, que necesitan encontrar su valor en otros que no son ellas: en sus hijos, en sus maridos, en sus trabajos, en sus obras de caridad, en sus partidas de bridge o sus abrigos de visón como si la mera existencia no fuera bastante.
Yo vengo de un entorno en el que la feminidad es vergonzante, la hormonidad un castigo, la sexualidad pecaminosa, y de los flujos corporales femeninos no se habla por que es de mal gusto. (No pasa exactamente lo mismo con los varones).
Pues esta ginecóloga americana habla con una candidez y una profundidad y un sentido común que yo no había oído a nadie, mucho menos en el mercado doméstico.
El trío de libros que traigo hoy son tres joyas que habría que hacer obligatorias en la educación de cualquier mujer.
1. Women's bodies, Women's Wisdom: desde la endometriosis hasta los chakras, nutrición, mitos, síntomas, qué hacer, qué preguntar, a dónde ir. El porqué de algunas cosas y la solución a muchas otras. No hay nada en el cuadro clínico y psicológico en la vida de una dama o pregunta interna o externa que la doctora no conteste en este tomo. Enfermedades venéreas, procesos psicológicos, abortos, dolores, trucos, historias reales, orgasmos, implantes de silicona, cómo se hacen los niños, de dónde viene el dolor de la regla o el de cabeza, qué es el herpes y qué es la progesterona, porqué se engorda, qué comer o no, vocabulario, explicaciones, enfermedades, embarazo y parto, definiciones. TODO. Ojalá me lo hubieran metido con embudo a los 12 años.
2. Mother-Daughter Wisdom: He aquí mi talón de Aquiles. He oído miles de veces ese famoso adagio que dice que los niños no vienen con libro de instrucciones. Pero esta ginecóloga yanki parece haberlo oído y ha querido aportar su granito de arena para ayudar en lo posible, si algo es posible ayudar, a las madres que no las tenemos todas con nosotras y apreciamos una palabra de ayuda, eso sí, imparcial y desinteresada. 
Alguien sabía que la rapidez con que un bebé aprende a controlar sus músculos (esfínteres) está relacionado con su carácter y su manera de percibir el mundo? Que los dolores menstruales y los cambios de humor están muy relacionados con el carácter de los padres? Que aprendemos de nuestros padres la capacidad de pensar y de ser felices? Que las películas no son un referente del comportamiento sexual de la gente? Que no hay porqué aceptar lo que no nos gusta, incluso a riesgo de romper una relación aparentemente perfecta? Qué el marido que tu padre quiere para tí, puede no ser el que más te convenga? Que una niña adolescente necesita vitaminas y no necesita chucherías? Que a lo mejor es más sano informar que asustar? O a veces es más sano asustar que informar? 
Veo todos los días gente que desprecia estas cosas como si fueran irrelevantes o mentiras o guarrerías; pero también estoy viendo gente que vive con una ignorancia y unos traumas y unas mentiras que no tienen sentido. Ojalá pueda librar a mi hija de todas ellas.
3. The Wisdom of Menopause: Yo que estoy menopaúsica perdida a los 40, no sería capaz de afrontar esta etapa de mi vida si no hubiera tenido la precaución (gracias a Oprah) de empollarme este libraco, iluminador, aclarador, tranquilizador. Mucha gente me dice que estoy pirada por andar a estas alturas educándome en la menopausia. Yo considero que lo que es una estupidez es hacerse el sueco y mirar para otro lado y luego pasarse las noches en vela y de depresión en depresión sin saber de dónde vienen las cosas y cómo pelearlas. No espero que el saber me evite los sofocos, el mal humor, los pelos, las arrugas y la osteoporosis, pero creo estar almacenando las herramientas para convivir conmigo misma y con mis síntomas con más recursos y con algo más de paz de espíritu (aunque en realidad yo espíritu no tengo).